Condenan a un año al imán de Cunit por coaccionar a una mediadora municipal

POR FIN, EMPEZAMOS A VER EL HORIZONTE. A ESTOS PAYASOS HAY QUE DARLES CON LA LEGALIDAD Y EN ESTE CASO, OPINO QUE SE QUEDARON CORTOS.

El juzgado penal número 2 de Tarragona ha condenado a un año de cárcel a Mohamed Benbrahim, imán de la comunidad de Cunit, por un delito de coacciones graves a Fátima Ghailan, marroquí de 31 años y mediadora cultural del ayuntamiento de esta localidad tarracoense.
La sentencia también condena a 9 meses de cárcel al presidente de la Asociación Islámica de Cunit, Abderraman el Osri, y a una multa de 730 euros a la hija del imán, Hafssa Ben Brahim, por el mismo delito de coacciones graves, mientras que absuelve a la esposa del líder espiritual, Zohra Aalalouch Ahmaddach.
Además, el juez prohíbe a los tres condenados acercarse a la víctima a menos de 500 metros y de comunicarse con ella durante un plazo de dos años, así como a indemnizarla conjuntamente con la cantidad de 1.500 euros por los daños morales ocasionados.
Sin embargo, absuelve al imán y al presidente de la Asociación Islámica del delito de calumnias que se les imputaba.
Los cuatro estaban acusados de coaccionar, calumniar y amenazar a la mediadora cultural marroquí, que se negaba a ponerse velo y conducía su propio vehículo.
El imán, su mujer y su hija recogieron firmas entre la comunidad islámica en contra de la mediadora, a quien llegaron a acusar de falsificar informes de arraigo social y de intervenir para que se denegaran ayudas sociales a musulmanes.
Si bien la sentencia recoge que ese escrito promovido por los condenados y del que recogieron firmas, en el que se criticaba la labor de Fátima Ghailan en el consistorio, "se enmarca en el ejercicio público de un derecho fundamental", considera que su presentación "constituye un subterfugio aparentemente legal".
En este sentido, subraya que la recogida de firmas comenzó a mediados de noviembre, y el documento está datado el 27 de noviembre de 2008, "casualmente la fecha consignada para la reunión con la alcaldesa que ésta convocó con posterioridad a lo sucedido el día 22 de noviembre" de ese mismo año.
Ese día, el imán habría abordado en plena calle a Fátima Ghailan para decirle que no duraría en Cunit "ni un día más", que iba a "acabar" con ella y su familia y que era una "puta ladrona".
"Esta circunstancia acredita que no podemos hablar de que la recogida de firmas comenzara con un escrito ya articulado, sino que se fueron recogiendo firmas en folios en blanco, o en otros folios, para, posteriormente a lo sucedido el 22 de noviembre, incorporar el folio que contiene la reclamación presuntamente ciudadana", indica la sentencia.
Igualmente, el juez considera "llamativo" que "existiera un rumor constante y anterior a la presentación del escrito de queja" sobre actitudes irregulares de la mediadora cultural en el desempeño de funciones o que "determinadas personas firmaran el escrito por convencimiento personal" y no supieran leer ni escribir".
La resolución judicial también recoge hechos concretos, como que se acusó a la víctima de haber escupido al imán, o que se insinuó a su marido que la mediadora cultural no era una buena esposa, así como el cuadro depresivo sufrido por la mediadora como consecuencia de la situación.
Por todo ello, la sentencia concluye que los acusados actuaron "ilícitmente con un plan premeditado de coaccionar a la mediadora cultural para que abandonara su puesto de trabajo y la localidad de Cunit, utilizando el escrito de queja presentado y el ejercicio de un derecho cívico de forma abusiva o antisocial para la consecución de una finalidad ilícita".

MOVIMIENTO DE IRA

 

ESTOS PAYASOS CON CHILABA, COMO SIEMPRE TOCANDO LOS HUEVOS. EN CUALQUIER MOMENTO SE VAN A ENCONTRAR CON UN BUEN GUANTAZO.

 

TEXTO OFICIAL MARROQUÍ DE LA NOTICIA.

Reanudación de los enfrentamientos en Melilia: un black out total impuesto por las autoridades españolas

 

Melilia ocupada - Los enfrentamientos entre la policía española y los jóvenes marroquíes de Melilia se reanudaron, la noche del domingo no lejos del barrio "la Cañada", escena desde la semana pasada de movimientos de protesta de jóvenes en ira contra su exclusión del programa local de contratación, se supo de fuente bien informada.

La policía española intervino en gran número para dispersar a los manifestantes, procedentes de los barrios periféricos, protestando contra el empeoramiento de sus condiciones de vida, hizo saber la misma fuente, señalando el despliegue de un importante dispositivo de seguridad en las entradas de los barrios en los cuales prevalecen los distrubios.
Los jóvenes manifestantes incendiaron vehículos aparcados en las avenidas "Reina Regente" y "Polvorin", antes de enfrentarse con la policía local. Por otra parte, las autoridades españolas velan por que ninguna información se filtre respecto a estos choques.

Las mismas imponen un Black-out total sobre estos acontecimientos en el momento en que los medios de comunicación locales recurren siempre a la desinformación a este respecto.
La policía española prohibió, ayer domingo, a la periodista marroquí Fatima Zahra Jdili de “Med radio” acceder a la ciudad de Melilia ocupada, y le notificó que era “persona non grata” en las dos ciudades ocupadas de Sebta y Melilia.
La situación social en estos barrios llamados “marginales”, habitados por marroquíes, sigue siendo explosiva sobre todo que la reunión entre los representantes de los habitantes y el delegado del gobierno central, Gregorio Escobar, celebrada el viernes, no desembocó en ningún resultado tangible y no se tomó “ninguna medida concreta” para responder a las reivindicaciones sociales de los habitantes.
Varias familias no tienen ninguna fuente de ingresos y la mayoría de los habitantes están en desempleo. Su exclusión de un programa de contratación de más de 1.300 personas fue la gota que colmó el vaso.
Los enfrentamientos entre la policía española y jóvenes de Melilia habían comenzado el martes en algunas zonas de la ciudad ocupada antes de extenderse a otros barrios. Asimismo, un joven de 16 años fue matado por balas disparadas por policías españoles, según medios de comunicación locales.
Más de una veintena de personas fueron arrestadas, entre ellos menores, a raíz de estos incidentes sin precedentes en la ciudad desde años.
Para restaurar una aparente calma, las fuerzas del orden usaron bombas lacrimógenas para dispersar a las multitudes, que reaccionaron erigiendo barricadas y quemando vehículos , neumáticos y contenedores de basura.
Los habitantes, ya decepcionados en el pasado por las promesas no cumplidas sobre todo por parte de políticos que no se interesan por ellos sino en tiempos de las elecciones para garantizar su voto, habían afirmado que van a mantener el movimiento de ira hasta la satisfacción de sus reivindicaciones sociales.